Nina María Kleivan es artista y actuó con un claro objetivo: Experimentar con el "diablo". Para ello vistió a su pequeña Faustina con el traje de Hitler, Stalin, Mussolini o Sadam.
La artista salía de un embarazo complicado que la dejó en silla de ruedas, al no poder pintar, se dedicó a coser estos trajes. Luego mandó las fotos a galerías de arte donde entendieran la "busqueda del mal que todos llevamos dentro", a la comunidad judía le sentó regulín...
Nina, cuyo padre fue internado en un campo de concentración nazi, afirma que: "Todos tenemos un diablo dentro. Incluso mi hija podría haber terminado sometiendo países con sus armas". De momento la niña tiene 11 años y aún no ha dado señales de llevar el diablo dentro!
A mí me da un lagarto, lagarto ver a un bebé vestido así!!!
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